MADRID 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
Tres personas con trasplantes de órganos están compitiendo en la Skoda Titan Desert Morocco 2024, la extrema carrera ciclista que recorre el desierto de Marruecos desde el pasado lunes 29 de abril hasta el 3 de mayo, dentro del equipo 'Titan Deja Huella Universae', integrado por personas trasplantadas, trabajadores sanitarios y aquellos que han donado los órganos de un ser querido fallecido.
Entre los más de 400 participantes que se enfrentan a los más de 600 kilómetros, con 7.000 metros de desnivel, que atraviesan el desierto marroquí desde Boumalne Dades hasta Maadid, destaca la presencia de Arkaitz Santamaría (trasplantado de médula), Francisco Javier Jiménez (trasplantado de riñón) y Víctor González (trasplantado de médula), que forman parte DX del equipo 'Titan Deja Huella Universae'.
El objetivo de estos tres 'héroes' es concienciar sobre la importancia de la donación de órganos, junto con la colaboración del Instituto Superior de Formación Profesional Universae. El presidente del equipo, Héctor Vargas, destaca que este proyecto "pretende poner en valor la donación de órganos y difundir sus valores más allá de las fronteras de mundo hospitalario, a través del deporte".
Tras la disputa de las dos primeras etapas, el equipo ha superado con éxito los obstáculos que han tenido enfrente, incluidas las inclemencias meteorológicas. "Esta última etapa ha sido larga, rodadora, y con mucho frío y viento, lo que ha provocado mucho cansancio", afirmó Vargas tras la segunda jornada de competición.
El desgaste también se trasladó a las bicicletas, sufriendo una avería mecánica el líder del equipo, que finalmente pudo alcanzar la meta pese al problema del amortiguador trasero. "Deberá acostumbrarse a pedalear así, en el campamento me han dicho que es imposible arreglarlo, ya que hace falta una pieza de la que no disponemos", lamentó.
En una prueba tan dura, disputada sobre un lugar tan inhóspito y traicionero como el desierto, expuesto a los designios del tiempo y a situaciones inesperadas, la estrategia consiste en "ir siempre en uno o dos grupos, para que nadie se quede solo", advirtió Vargas.
Todavía quedan por delante más de 400 kilómetros para alcanzar la ansiada meta en Maadid, pero los participantes del equipo 'Titan Deja Huella Universae' están realizando un hito difícil de igualar, concienciando sobre la importancia de la donación de órganos y 'dejando' una huella imborrable en el desierto marroquí.