MADRID, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un radiotelescopio ha completado la búsqueda más profunda y amplia a bajas frecuencias de tecnologías alienígenas, escaneando un parche de cielo que se sabe que incluye al menos 10 millones de estrellas.
Los astrónomos utilizaron el telescopio Murchison Widefield Array (MWA), en el confín de Australia Occidental, para explorar cientos de veces más ampliamente que cualquier búsqueda anterior de vida extraterrestre.
El estudio, publicado en Publications of the Astronomical Society of Australia, observó el cielo alrededor de la constelación de Vela. Pero en esta parte del Universo al menos, parece que otras civilizaciones son esquivas, si es que existen.
La investigación fue realizada por la astrónoma de CSIRO doctora Chenoa Tremblay y el profesor Steven Tingay, del nodo de la Universidad Curtin del Centro Internacional de Investigación en Radioastronomía (ICRAR).
Tremblay dijo que el telescopio buscaba potentes emisiones de radio en frecuencias similares a las de FM, que podrían indicar la presencia de una fuente inteligente. Estas posibles emisiones se conocen como 'tecnofirmas'.
"El MWA es un telescopio único, con un campo de visión extraordinariamente amplio que nos permite observar millones de estrellas simultáneamente", dijo en un comunicado.
"Observamos el cielo alrededor de la constelación de Vela durante 17 horas, luciendo más de 100 veces más ancho y profundo que nunca. Con este conjunto de datos, no encontramos firmas tecnológicas, ni señales de vida inteligente", añadió.
COMO UNA PISCINA COMPARADA CON LOS OCÉANOS DE LA TIERRA
El profesor Tingay dijo que a pesar de que esta fue la búsqueda más amplia hasta el momento, no se sorprendió por el resultado.
"Y aunque este fue un estudio realmente grande, la cantidad de espacio que miramos fue el equivalente a tratar de encontrar algo en los océanos de la Tierra pero solo buscar un volumen de agua equivalente a una gran piscina en el patio trasero.
"Dado que realmente no podemos suponer cómo las posibles civilizaciones alienígenas podrían utilizar la tecnología, necesitamos buscar de muchas formas diferentes. Usando radiotelescopios, podemos explorar un espacio de búsqueda de ocho dimensiones.
"Aunque hay un largo camino por recorrer en la búsqueda de inteligencia extraterrestre, los telescopios como el MWA seguirán superando los límites, tenemos que seguir buscando".
El MWA es un precursor del siguiente instrumento, el Square Kilometer Array (SKA), un observatorio de 1.700 millones de euros con telescopios en Australia Occidental y Sudáfrica.
"Debido a la mayor sensibilidad, el telescopio de baja frecuencia SKA que se construirá en Australia Occidental será capaz de detectar señales de radio similares a las de la Tierra de sistemas planetarios relativamente cercanos", dijo el profesor Tingay.
"Con el SKA, podremos estudiar miles de millones de sistemas estelares, buscando firmas tecnológicas en un océano astronómico de otros mundos".
El MWA está ubicado en el Observatorio de Radioastronomía de Murchison, una instalación astronómica remota y silenciosa establecida y mantenida por CSIRO, la agencia científica nacional de Australia. El SKA se construirá en la misma ubicación, pero será 50 veces más sensible y podrá realizar experimentos SETI mucho más profundos.