MADRID 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía y la defensa de Alberto Sierra Olivan, un ciudadano español requerido por las autoridades de Perú por su participación en el tráfico de aves prohibidas hacia España, se han opuesto este jueves a su extradición defendiendo que el acusado no ha incurrido en ningún delito.
Así se ha expresado el Ministerio Fiscal --que se ha ratificado en su oposición a la extradición-- explicando que los diferentes tipos de tucanes importados no están protegidos en el Código Penal español, que tan solo contempla a la fauna nacional.
Según la Fiscalía, Sierra tampoco habría cometido un delito de contrabando, puesto que el total de todos los animales no supera los 50.000 euros que trazan la frontera entre el delito aduanero y la mera infracción administrativa.
De esta forma, el fiscal ha defendido que se trata de una "manifiesta y clara infracción administrativa de orden aduanero que no corresponde enjuiciar" a la Audiencia Nacional. "Por tanto, y sin entrar en mayores argumentos", el Ministerio Público ha rechazado su entrega, que tampoco "ha lugar por razones de proporcionalidad".
Por su parte, la defensa de Sierra se ha adherido a los argumentos de la Fiscalía y ha asegurado que no concurre el principio de doble incriminación. "Entendemos que es una sanción administrativa y solicitamos un auto en que no ha lugar a la extradición", ha añadido.
SORPRENDIDO CON VARIEDADES DEL TUCÁN COMO EL CABEZÓN O EL RABIROJO
El acusado, que ha rechazado hacer uso de su turno de palabra, fue sorprendido en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez de Lima el 25 de junio de 2016 en posesión de un total de 34 aves silvestres sin contar con la autorización para ello, y entre los que se contaban algunas variedades del tucán como el andino, el cabezón o el rabirojo.
El ciudadano español fue detenido en septiembre de 2019 en Logroño por agentes de la Guardia Civil en cumplimiento de una orden internacional de detención que se basaba, precisamente, en la adquisición, transporte y entrega de esas mismas aves con la finalidad de su exportación a España.
Esto dio lugar a la apertura de la Operación Suzaku, culminada en noviembre de 2017, con la detención de una treintena de personas integrantes de una organización criminal dedicada a la introducción ilegal en España de aves y huevos, adquiridos en diversos países de África y Sudamérica.
La desarticulación de esta organización, que utilizaba mulas para el transporte de las aves o sus huevos por vía aérea, se saldó con la detención de 29 personas en distintos puntos del territorio nacional, así como en otros países, a las que habría que sumar otras 2 personas que han sido investigadas no detenidas en España.