Los ministros de Exteriores del foro consideran que ningún país "se beneficiaría" de una escalada
MADRID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los ministros de Exteriores del G7 han asegurado este lunes que las "acciones" y "contrarreacciones" amenazan con extender el conflicto en la Franja de Gaza y en Líbano a toda la región de Oriente Próximo, especialmente tras los últimos bombardeos israelíes contra el partido-milicia chií libanés Hezbolá, que han dejado en un día cerca de 500 muertos, y el posterior aumento de ataques del grupo islamista contra territorio israelí.
"(Los miembros) han observado con profunda preocupación la tendencia a la escalada de violencia en Oriente Próximo y sus repercusiones en la estabilidad regional y en las vidas de los civiles destruidas por este conflicto, desde la Franja de Gaza hasta la Línea Azul libanesa-israelí. Las acciones y contrarreacciones corren el riesgo de magnificar esta peligrosa espiral de violencia y arrastrar a todo Oriente Próximo a un conflicto regional más amplio con consecuencias inimaginables", reza un comunicado del G7 publicado por el ministro de Exteriores de Italia, Antonio Tajani, que ocupa la Presidencia del foro.
El G7 ha considerado que ningún país de la región se beneficiará de una mayor escalada, por lo que ha instado a detener el "actual ciclo destructivo", tras lo que han ensalzado la labor de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) en su papel de "estabilizador esencial".
Tras ello, han reiterado su condena a los "horrendos ataques" del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) del 7 de octubre, que dejaron 1.200 muertos y más de 240 rehenes, y han pedido la liberación de los 101 secuestrados que continúan cautivos en la Franja.
De igual forma han instado a respetar el Derecho Internacional y el Derecho Internacional Humanitario y a implementar las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU para reducir las actuales tensiones y han mostrado su "firme apoyo" a los esfuerzos de mediación de Estados Unidos, Egipto y Qatar de cara a lograr un alto el fuego en Gaza.
Además, han reafirmado su compromiso con una solución de dos Estados que incluya a la Franja de Gaza y a Cisjordania "unificados" bajo la Autoridad Palestina, si bien han resaltado que el reconocimiento debe ser mutuo y "en el momento apropiado".
Es por ello por lo que han mostrado su preocupación ante el riesgo de "debilitar" a la Autoridad Palestina por la inestabilidad y la inseguridad en Cisjordania tanto por el aumento de la violencia de los colonos israelíes como la expansión de los asentamientos y el deterioro de la situación de seguridad marcada por el aumento de las operaciones israelíes.
"Han expresado su profunda alarma por el alto precio que este conflicto ha causado entre los civiles, deplorando por igual todas las pérdidas de vidas civiles y observando con gran preocupación que, después de casi un año de hostilidades e inestabilidad regional, son en su mayoría civiles, incluidos mujeres y niños, quienes están pagando el precio más alto. La protección de los civiles debe ser una prioridad absoluta para todas las partes en todo momento", han añadido.
Los miembros del G7 también han expresado su preocupación por los niveles "sin precedentes de inseguridad alimentaria en la Franja, por lo que han pedido que se garantice un acceso humanitario "pleno, rápido, seguro y sin obstáculos en todas sus formas y a través de todos los puntos fronterizos pertinentes" y que se garantice la protección de los trabajadores humanitarios, destacando el "crucial papel" tanto de la ONU y sus agencias como de otros actores humanitarios.