BOGOTÁ, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han hecho un llamamiento al diálogo para que Bogotá y Caracas pongan fin a la escalada de tensión por el cierre de la frontera, pero han exigido a la Casa de Nariño "respeto" a Venezuela para no "transplantar el militarismo".
"Hay que respetar la soberanía de Venezuela. Hay que cesar la perfidia que significa trasplantar el paramilitarismo que tantas victimizaciones ha causado en Colombia", ha dicho la guerrilla a través de un comunicado difundido este viernes.
Las FARC han defendido que "el cangro del paramilitarismo no puede destruir los lazos de concordia que históricamente, desde la lucha por la independencia, han hecho de Colombia y Venezuela una misma familia con un destino común de sueños de dignidad y libertad".
La insurgencia ha señalado como una de las causas de inestabilidad "la confrontación en Colombia que, como la profunda crisis humanitaria que hoy desborda la frontera, tiene raíz en el injusto orden social vigente, cuyo responsable son los sucesivos gobiernos que han pasado por la Casa de Nariño".
A este respecto, ha destacado "la innegable solidaridad y apoyo social que desde los tiempos del comandante (Hugo) Chávez han recibido quienes tuvieron que partir hacia el exilio porque no hubo en nuestro país los beneficios de la inclusión y el respeto que aún seguimos reclamando".
"A esto no podemos cerrar los ojos, y por ello creemos que debe aflorar la serenidad y el sentido común, de manera tal que le salgamos al paso a ciertos políticos irresponsables que solo viven para sembrar el odio hacia Venezuela, pescar en río revuelto y favorecer sus intereses personales", ha sostenido.
Así, las FARC han llamado a "cerrar los espacios a la crispación de los ánimos y el guerrerismo, haciendo que resplandezca el derecho de los pueblos, por encima de todos aquellos que quieren mediante la guerra económica y todo tipo de conspiraciones, desestabilizar el Gobierno legítimo de Nicolás Maduro".
Además, han subrayado que "Venezuela es y seguirá siendo fundamental para la paz de Colombia". "Fortalecer las relaciones bilaterales es condición indispensable para que en Colombia se consolide la construcción de una paz estable y duradera que irradie influjos de hermandad al continente", han afirmado.
"Lo más conveniente", por tanto, "es buscar, mediante un diálogo constructivo y sincero, la normalización de la situación en la frontera", para lo cual han propuesto la creación de "una zona binacional de integración y desarrollo que favorezca la construcción del proyecto de Patria Grande".
"Tenemos que echarle agua al incendio 'chovinista' para promover la unidad e integración de dos naciones con una misma historia, hijas de un mismo padre, el Libertador Simón Bolívar (...) Que perduren nuestros lazos de amistad", han reclamado.
CRISIS BILATERAL
La tensión entre Colombia y Venezuela se ha disparado desde el 19 de agosto por al ataque que tres miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) sufrieron por parte de presuntos paramilitares desde el lado colombiano.
En respuesta, Maduro ordenó el cierre de los pasos fronterizos de San Antonio del Táchira y Ureña durante 72 horas, pero el pasado domingo lo renovó y declaró el estado de excepción durante 60 días en algunos municipios de la línea limítrofe.
El dirigente izquierdista ha ordenado igualmente "tomar medidas extraordinarias" para "extirpar la raíz criminal en la frontera" que pasan, principalmente, por mantener "al máximo nivel" la presencia policial y militar en la zona.
El líder 'chavista' ha achacado este aumento de la violencia al incesante flujo de colombianos a Venezuela, algunos de los cuales "vienen huyendo de la guerra", si bien otros "han traído el fenómeno del tráfico de drogas".
Por su parte, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, ha denunciado deportaciones masivas de los compatriotas que viven legalmente en Venezuela y ha reclamado al país vecino que pare esta "salvajada", pero se ha encontrado sin respuesta.
Tras varias reuniones entre a nivel ministerial para intentar superar la crisis en la frontera --sin que Santos y Maduro hayan hablado, al parecer, por negativa del venezolano-- finalmente este viernes ambos países han llamado a consultas a sus embajadores.