MADRID, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
Venezuela e Irán mantienen una estrecha cooperación en materia energética y habrían preparado conjuntamente la explotación de las reservas de uranio venezolanas, según se extrae de cables diplomáticos fechados en 2006 y 2009 y hechos ahora públicos por Wikileaks. En dichos documentos de la Embajada estadounidense en Caracas se analiza igualmente la posibilidad real de que Venezuela aproveche a sus aliados iraníes para adquirir nuevo armamento y desarrollar un programa nuclear.
La legación matiza que el plan de Caracas para extraer uranio podría "permanecer en un limbo burocrático y financiero durante años, y podría no completarse nunca". Las sospechas respecto a las intenciones del Gobierno de Hugo Chávez quedan respaldadas por las amenazas de las autoridades de expropiar terrenos que podrían albergar depósitos radiactivos.
El ex ministro de Exteriores venezolano Ali Rodríguez había señalado que la firma de acuerdos bilaterales se debe a la coincidencia de las políticas petrolíferas entre ambos países.
El cable diplomático también recoge una noticia del diario argentino 'La Nación', el cual reveló que el embajador venezolano en Buenos Aires, Roger Capella Mateo, abandonó una reunión del Mercado Común del Sur (MERCOSUR) en el que el ex ministro de Exteriores Miguel Ángel Moratinos mostró la oposición del Gobierno español al rechazo de Teherán a los controles internacionales sobre su programa nuclear.
Por otro lado, la diplomacia norteamericana resta credibilidad a los rumores divulgados por la oposición venezolana sobre la implicación de Caracas en el tráfico de armas nucleares y la extracción de uranio para Teherán. Tampoco ponen en valor las declaraciones sobre un plan a largo plazo para el desarrollo del potencial nuclear del país latinoamericano.
Distintos expertos consultados por la Embajada estadounidense hablan de la participación de Irán en el sector minero venezolano. Nelson Lara, miembro del partido Acción Democrática y profesor de la Universidad Central de Venezuela, asegura que 37 iraníes trabajaban en el Instituto Venezolano de Geología y Minas.
En el cable fechado el 7 de octubre de 2009 se revela que Irán ayudó en los sondeos sobre el terreno del alcance de los depósitos de uranio en Venezuela, según el ex ministro de Industria Básica y Minería Rodolfo Sanz, quien adelanta que dichas tareas podrían prolongarse durante tres años.
COOPERACIÓN MILITAR
Otros informes en propiedad de la Embajada se refieren a la colaboración en materia militar. Al parecer, Venezuela ha pedido ayuda a Irán para establecer su fuerza de reservistas, y un militar retirado reveló que en territorio venezolano hay soldados iraníes entrenando a los reservistas de dicho país.
Caracas también estaría fijándose en los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria y la fuerza de movilización popular (Basij) iraníes a la hora de desarrollar su estructura militar.
En cuanto a la supuesta cooperación nuclear, la diplomacia estadounidense concluye que Venezuela no dispone de la capacidad científica necesaria para desarrollar un programa de energía nuclear, por lo que Estados Unidos estima que Caracas intentaría servirse de la experiencia de un aliado como Teherán.