MADRID 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales ha negado este lunes ante la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 4 de Majadahonda que cometiera irregularidades durante su gestión al frente de la entidad, según han confirmado fuentes jurídicas a Europa Press.
Rubiales estaba citado a comparecer a las 10.00 horas ante la jueza Delia Rodrigo, que le investiga por su gestión como presidente entre 2018 y 2023, con el foco puesto en el traslado de la Supercopa a Arabia Saudí y el supuesto desvío de fondos en irregularidades asociadas a contratos.
Ha llegado media hora antes, acompañado de su abogado, José Vicente Gómez Tejedor, y sin hacer comentarios a los medios de comunicación, que le esperaban en la puerta desde primera hora de la mañana a raíz del procedimiento que se sigue en su contra por presuntos delitos de corrupción en los negocios, administración desleal y blanqueo de capitales.
INTERMEDIACIÓN "HABITUAL" PARA LA SUPERCOPA
Según las fuentes consultadas, Rubiales --que en este momento sigue compareciendo en sede judicial-- ha contestado a preguntas de la juez y de la Fiscalía.
En relación al contrato para llegar la Supercopa de fútbol a Arabia Saudí, ha asegurado que la RFEF no acudió a Kosmos, sino que fue la compañía del exfutbolista Gerard Piqué quien se puso en contacto con ellos para avisarles de que SELA --la compañía estatal saudí-- quería invertir en el fútbol. Con todo, ha precisado que lo que la empresa pretendía era conseguir el acuerdo más bajo posible, mientras que en la Federación buscaban cerrar el precio más alto.
En este sentido, aunque ha reconocido que el exjugador del F.C. Barcelona le llamó para avisarle de esta posibilidad de negocio, ha precisado que le atendió como atiende a cualquier persona que le llama con este tipo de ofrecimiento.
Así las cosas, ha insistido en que la Federación no buscó a Kosmos y que tampoco se alió con esta empresa para buscar a SELA, sino que la compañía saudí les contactó. Sobre este extremo, además, ha recordado que en la RFEF también recibieron propuestas de China, Rusia e India y que en esos casos tuvieron "intermediarios".
Según ha dicho, es "habitual" en el mundo del fútbol que haya una intermediación. Ha incidido en que todo fue "limpio" y en que el contrato lo redactó el comisionado externo de la Federación, en referencia a Tomás González Cueto, también investigado en la causa. Sobre este punto, ha señalado que, aunque no era necesario que la asamblea o la junta aprobaran el contrato, aún así lo hicieron.
SE AMPARA EN LA "TRANSPARENCIA"
Al hilo, ha asegurado que el contrato no tenía que pasar por la comisión económica de la Federación, dado que se trataba de un ingreso y no de un gasto. Y ha recalcado que él mismo podía haber firmado el contrato sin dar cuenta al resto, pero ha insistido en que actuó con "transparencia".
No obstante, ha apuntado que la unidad de 'compliance' le dijo que el hecho de que la Federación firmara con Kosmos no era ilegal y que se redactó informe "positivo" de la comisión de ética.
Con todo, ha señalado que no se pactó ninguna comisión que no estuviese en el contrato, que no llegó a negociar para Kosmos y que se limitó a negociar el dinero que llegaría a la Federación.
En este punto, Rubiales ha subrayado que cuando llegó a la Federación se creó la unidad de 'compliance' --para detectar posibles irregularidades--, la comisión económica y los códigos de transparencia.
Según las fuentes consultadas, ha manifestado que antes de su gestión se había señalado al anterior presidente de adjudicar partidos "a dedo" y que, con su llegada, eso cambió y los partidos se empezaron a adjudicar en licitación y de forma abierta.
En el marco del interrogatorio, se le ha preguntado a su vez por las obras del estadio de La Cartuja, Sevilla. Sobre este asunto, también ha negado irregularidades y ha asegurado que pasó el asunto al comité económico.